Iba
la flor
por
la senda
de
sus sueños
con
los pétalos
de
miel
a
punto
de
florecer
y
fue la bestia
con
su instinto
de
hierro
quien
destruyó
la
inocencia.
La
poesía
a
veces
es
un verso inútil
en
el desierto
y
otras tantas
es
una lágrima
compartida
en
la voz
de
miles
que
despiertan…